Efectos y tratamiento de la IMHA

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La anemia en los perros no es una enfermedad específica sino el resultado de alguna enfermedad en curso. La anemia es un número reducido de glóbulos rojos o de hemoglobina o de ambos.

Qué es la IMHA

La anemia hemolítica inmunomediada (AHIM), antes conocida como anemia hemolítica autoinmune o AIHA, es una enfermedad «secundaria» que se produce cuando el propio sistema inmunitario del organismo ataca sus glóbulos rojos. La AHIM se refiere a todas las anemias que se producen cuando el sistema inmunitario destruye inadvertidamente sus propios glóbulos. La AHIM es secundaria a un ataque inmunitario dirigido contra una enfermedad subyacente. Los glóbulos rojos se recubren rápidamente con pequeñas proteínas de anticuerpos, marcando esencialmente estos glóbulos rojos para su destrucción.

Tipos de anemia

Hay dos clasificaciones de anemia. En la primera, el cuerpo pierde sangre más rápido de lo que se puede regenerar, pero su mascota todavía es capaz de producir nuevos glóbulos rojos en su médula ósea. En la segunda, su perro ha perdido la capacidad de producir nuevos glóbulos rojos en la médula ósea.

Hay muchos tipos y causas diferentes de anemia. Las categorías de anemia pueden ser causadas por un traumatismo, cáncer, enfermedad inmunomediada, que es una enfermedad en la que el cuerpo ataca a sus propias células u órganos, enfermedad infecciosa, toxinas, defectos genéticos, enfermedad inflamatoria, deficiencia de hierro, reacciones a los medicamentos, insuficiencia renal y enfermedad crónica generalizada. Pérdida de sangre causada por traumatismos o lesiones, parásitos como pulgas, garrapatas y gusanos, y enfermedades que impiden la coagulación de la sangre. Las zonas más comunes de sangrado son el tracto digestivo y si su perro sufre anquilostoma o gusano del corazón.

No hay predisposición de género o edad para la anemia. La mayoría de los perros anémicos actúan débiles o cansados. La piel puede parecer pálida con una decoloración amarilla. Muchos perros con IMHA tienen síntomas como vómitos o pérdida de apetito. Dependiendo de la causa subyacente de la anemia, su mascota puede mostrar algunos o todos los síntomas y signos. Algunas mascotas pueden no mostrar ningún signo.

Síntomas

Los síntomas de la anemia en los perros incluyen encías pálidas, fatiga, apatía, pérdida de apetito y parecer débil y deprimido. Su mascota también puede dormir más de lo habitual y dejar de asearse. Los perros anémicos deben respirar más rápido para mantener su cuerpo oxigenado y, por tanto, su corazón late más rápido. Suelen tener niveles de energía bajos. Otros signos más graves a los que hay que prestar atención son los episodios de colapso, las convulsiones, la evidencia de pérdida de sangre, la presencia de sangre en la orina o las heces, los vómitos, la pérdida de peso y la decoloración amarilla de la piel.

Diagnóstico

La anemia hemolítica inmunomediada se diagnostica normalmente basándose en la sospecha y en la ausencia de otras causas específicas de anemia.La evaluación de un perro anémico consiste en análisis de sangre, radiografías, ultrasonidos, exámenes de médula ósea y otras pruebas de diagnóstico.

Tratamiento

Un perro con IMHA suele ser inestable. Mejorar el suministro de oxígeno a las células puede prevenir las consecuencias de la disfunción de múltiples órganos. Los casos graves de anemia requieren transfusiones de sangre para estabilizar a su perro mientras se diagnostica la causa de la anemia y se trata la causa subyacente. No es raro que un perro gravemente afectado necesite muchas transfusiones. Los casos leves de anemia no requieren una transfusión de sangre. Se necesitan cuidados de apoyo para mantener el equilibrio de líquidos y las necesidades nutricionales del perro. Los casos leves o moderados de anemia se tratan con vitaminas y minerales para aumentar la sangre. En los casos más graves, el bazo se agranda porque se encuentra procesando muchos más glóbulos rojos dañados de lo que normalmente hace y puede ser necesario extirparlo. Lo más importante es suprimir la destrucción desenfrenada de glóbulos rojos por parte del sistema inmunitario.

En el caso de la IMHA, no hay una causa conocida. El tratamiento para esta condición es la Prednisona (hormonas corticosteroides) que frena el ataque del cuerpo a los glóbulos rojos. Si no se observa respuesta con los cortisteroides, es necesario complementar el tratamiento con agentes inmunosupresores más potentes. Los medicamentos más utilizados en este caso son la azatioprina y la ciclofosfamida. Algunos perros no responden al tratamiento, pero si su perro responde, el pronóstico es bueno.

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