Convulsiones en racimo en perros

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Las convulsiones en racimo en los perros son las múltiples convulsiones que un perro experimenta en un corto período de tiempo (como en un intervalo de 24 horas). Un perro que presenta convulsiones en racimo se encuentra en un estado crítico, ya que estas convulsiones pueden poner en peligro su vida. Las convulsiones pueden controlarse con medicación, pero debe establecerse su causa para poder tratar al perro con la medicación adecuada.

Causas de las convulsiones en racimo en los perros

Las convulsiones en racimo pueden ser el resultado de un problema en el cerebro, un tumor que interrumpe la comunicación entre las partes del cerebro o la falta de oxígeno en el cerebro. Las convulsiones pueden ser causadas por un nivel bajo de glucosa en la sangre (hipoglucemia) o un déficit de producción de hormonas tiroideas (hipotiroidismo). Las intoxicaciones también pueden provocar episodios de convulsiones.

Las convulsiones también pueden producirse sin causa aparente, lo que se conoce como epilepsia idiopática. Al examinar al perro, el veterinario comprobará que no hay nada malo en él, pero las convulsiones siguen produciéndose.Algunas razas de perros son susceptibles de sufrir convulsiones (border collies, cockerspaniels, perros salchicha, pastores alemanes, bóxers) y la epilepsia también puede ser genética. Si la enfermedad es genética, puede manifestarse cuando el perro tiene tan sólo 6 meses de edad, o más tarde en la vida.

Algunas investigaciones han revelado que los caninos machos son más propensos a las convulsiones en racimo.

Síntomas de las convulsiones en racimo

Una convulsión será señalada por un colapso repentino, un movimiento anormal de las extremidades, un babeo excesivo, un movimiento incontrolable de la mandíbula o incontinencia.El perro no responderá y no estará consciente; no será capaz de controlar sus espasmos. Las convulsiones son muy agotadoras, por lo que el perro descansará mucho entre convulsiones y tendrá movimientos más lentos. Puede incluso tambalearse.

Diagnóstico de las convulsiones

Cuando el perro tiene convulsiones en racimo se le hará una prueba de glucosa inmediatamente. También se comprobará la función tiroidea. El veterinario también comprobará si el perro ha sido envenenado. Se realizará una tomografía computarizada o una prueba de resonancia magnética para comprobar si hay tumores o lesiones cerebrales.

Después de las convulsiones

Si tu perro tiene una convulsión, debes retirar cualquier objeto peligroso o afilado de la zona. Asegúrate de que no está cerca de las escaleras, ya que puede temblar incontroladamente y caer por ellas.

Apague las luces y asegúrese de que no hay ruidos fuertes en la habitación.Anote todas las cosas que hace su perro y vea si puede detectar un desencadenante que pueda haber causado la convulsión. Ponga a su perro a descansar cuando termine la crisis. Lo ideal es consultar al veterinario inmediatamente, pero si no lo haces, asegúrate de anotar la frecuencia de las convulsiones.

Tratamiento

Las convulsiones pueden prevenirse y controlarse mediante la administración de medicamentos anticonvulsivos como fenobarbital, primidona, diazepam, fenitoína o bromuro de potasio. Sin embargo, debe establecerse la causa de las convulsiones en racimo.

El tratamiento de emergencia para las convulsiones en racimo contiene diazepam, fenobarbital o propofol. El veterinario también puede recomendar la terapia de fluidos.

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