Vómitos caninos y comida: Cómo controlar la ingesta de su perro

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La mayoría de los propietarios de perros se han dado cuenta de que los vómitos caninos son una dolencia bastante común, ya que muchos perros comen prácticamente cualquier cosa. La causa más frecuente de los vómitos caninos es la ingesta de alimentos no digeribles, como hierba, comida que se ha estropeado o algo que ni siquiera es comida, como un trozo de papel o una zapatilla de deporte de un niño. Otra causa sería que el perro comiera en exceso o demasiado rápido. También es posible que su perro haya vomitado porque es alérgico a algo que ha ingerido y el vómito es una reacción adversa. Asegúrate de impedir el acceso de tu perro a dichos objetos. Pero por ahora, el cuerpo de tu perro necesita recuperarse.

Deja que el sistema digestivo descanse

Uno de los primeros enfoques necesarios para tratar los vómitos caninos agudos es dar al sistema digestivo de su perro un descanso completo. Una vez que los vómitos frecuentes y activos han cesado, es importante no alimentar a su perro durante 24 horas y asegurarse de darle pequeñas cantidades de agua fresca para beber. Alimentar a un perro con sus cantidades normales de comida y agua sólo agravará la inflamación que está causando el malestar gastrointestinal.

Es posible que tu perro siga vomitando al principio, hasta que su sistema gastrointestinal se calme. Si tu perro intenta beber grandes cantidades de agua demasiado rápido, dale un par de cubitos de hielo cada vez. Una vez que hayan cesado los vómitos, ofrece a un perro pequeño (como un terrier) una cucharadita de agua cada vez, a intervalos frecuentes (cada quince o veinte minutos aproximadamente). A un perro más grande, como un labrador, ofrézcale el doble.

Mantener los niveles de azúcar en sangre

Mientras el perro está en ayunas, corre el riesgo de sufrir una hipoglucemia. Para mantener estables los niveles de azúcar en sangre de su perro, frote aproximadamente una cucharadita de miel o jarabe de arce en las encías de un perro pequeño cada seis horas. Frote hasta tres cucharaditas de miel o jarabe de arce en las encías de un perro de raza grande.

Después de 24 horas, introduce en su dieta pequeñas porciones de alimentos muy suaves. Una buena opción es un poco de pollo hervido, sin piel y sin hueso, mezclado con arroz hervido normal o carne de hamburguesa hervida sin grasa con queso cottage. Alimente a su perro con varias porciones del tamaño de un bocado en lugar de una comida grande. El tamaño de la porción debe ser el equivalente a un par de cucharaditas.

Introducir gradualmente la dieta normal

Después de un día de alimentar a su perro con estas pequeñas porciones de comida blanda, si los vómitos han cesado, puede empezar a mezclar la comida blanda mitad y mitad con la comida normal de su perro.

En el transcurso de los días siguientes, puedes introducir un poco más de la comida normal del perro con la dieta blanda, hasta que gradualmente, durante otros días, haya retomado su régimen alimenticio normal. Es muy importante introducir gradualmente la dieta normal de tu perro, porque hacerlo de repente podría desencadenar una recaída.

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