Melanoma canino

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El melanoma canino es un tumor maligno. Un melanoma se manifiesta a través de lesiones cutáneas que tienen formas o colores inusuales.Los lunares pueden convertirse en melanomas cuando cambian repentinamente de forma y color. Un melanoma está formado por melanocitos, que son las células que determinan la pigmentación oscura de la piel. Los melanomas caninos suelen localizarse en la piel, los dedos de los pies, la boca o detrás de los ojos, y son más frecuentes en los perros de pelo blanco y en ciertas razas. El cáncer es una enfermedad grave y debe detectarse lo antes posible para evitar que se extienda y mejorar la calidad de vida de la mascota.

Síntomas del melanoma canino

El melanoma en los perros puede pasar desapercibido debido al pelaje que cubre la piel y a la localización de las lesiones.

Los signos más visibles del melanoma aparecen en la piel en forma de lesiones de color oscuro y con formas irregulares. Tenga cuidado con los lunares que cambian de tamaño, color y forma y que pueden convertirse en melanomas. Estos lunares pueden picar y sangrar con frecuencia. Los melanomas también pueden aparecer en la boca del perro o en los dedos de los pies. Cuando la boca se ve afectada, habrá otros síntomas como mal aliento, exceso de babas, estornudos, tos o problemas para tragar. También puede causar rechazo a comer y pérdida de peso.

Cuando el cáncer está en metástasis, el perro experimentará fatiga, náuseas, depresión y cambios de comportamiento.

Causas del melanoma canino

Los melanomas en los perros no tienen una causa claramente establecida, pero pueden estar relacionados con la genética y la exposición prolongada al sol, especialmente en los perros de pelo blanco. Es importante mantener a los perros de pelo blanco alejados del sol y utilizar un protector solar adecuado para prevenir la aparición de melanomas.

Diagnóstico del melanoma canino

Los melanomas en los perros pueden diagnosticarse mediante un examen médico.El veterinario debe establecer lo avanzado que está el cáncer. Los análisis de sangre pueden revelar un recuento bajo de glóbulos blancos. También se realizan radiografías para establecer si el cáncer tiene metástasis. El melanoma también puede ser examinado y, en algunos casos, se realizará una biopsia.

Opciones de tratamiento

El tratamiento del melanoma canino debe centrarse en la extirpación del mismo o en evitar que el cáncer se extienda. El veterinario establecerá si la cirugía es posible o recomendable. Si la cirugía no es posible, el veterinario prescribirá quimioterapia y radioterapia.

Sin embargo, incluso con la cirugía o el tratamiento, el cáncer puede reaparecer o extenderse más. El perro debe ser vigilado cuidadosamente y cualquier signo alarmante debe ser comunicado al veterinario. Un perro con melanoma puede llevar una vida de calidad, siempre que reciba los cuidados y el tratamiento necesarios.

Es muy importante que el perro sea aseado con regularidad, para poder detectar posibles melanomas lo antes posible. Revisa el interior de la boca en busca de manchas o lesiones oscuras y mira también los dedos de los pies. La detección precoz de un melanoma puede ayudar al veterinario a administrar la terapia y posiblemente evitar que el cáncer se extienda por el resto del cuerpo.

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