agosto 19, 2021

Fobia a los perros en los niños

[ad_1]

La fobia a los perros, al igual que otros tipos de fobias, son comunes en los niños. Muchos niños experimentan fobias, o miedos irracionales y desproporcionados, debido a una mala experiencia, o porque sus padres, hermanos, familiares o compañeros les han enseñado a temer el objeto de su fobia. Algunas fobias, como el miedo a los extraños o a la oscuridad, son normales en los niños y suelen desaparecer por sí solas cuando el niño crece y aprende que no hay nada que temer. Cuando las fobias no desaparecen por sí solas, la terapia puede ayudar.

Cómo reconocer la fobia a los perros en los niños

Los niños pueden desarrollar fobia a los perros después de haber sido mordidos, atacados o asustados gravemente por un perro. Si alguien con quien su hijo pasa el tiempo -un amigo, un pariente u otro miembro de la casa- padece miedo a los perros, entonces podría enseñarle inadvertidamente que los perros son algo a lo que hay que temer, y transmitirle su propia fobia a los perros.

Los niños que padecen fobia a los perros se ponen excesivamente ansiosos en presencia de los mismos, porque creen que son muy peligrosos. Por lo general, las fobias consisten en un miedo intenso que es muy desproporcionado con respecto a la cantidad de peligro que el objeto del miedo realmente presenta. Si su hijo ha tenido una mala experiencia con un perro, puede tener la idea errónea de que todos los perros representan un gran peligro.

Si tu hijo está ansioso, puede parecer pegajoso, distraído o inquieto. Puede acudir a ti en busca de protección. Puede tener problemas para dormir. Podría sufrir malestar estomacal, dolores de cabeza, náuseas, respiración acelerada, ritmo cardíaco rápido y sudoración.

Cómo tratan los terapeutas la fobia a los perros

Los terapeutas tratan las fobias exponiendo gradualmente a la persona al objeto de su miedo, para que acabe viendo que el objeto del miedo no es tan peligroso como pensaba. Un terapeuta puede empezar hablando con tu hijo sobre lo que teme que ocurra si se enfrenta a un perro. El terapeuta puede enseñar a tu hijo técnicas de relajación que le ayuden a afrontar su miedo a los perros cuando surja. Por último, el terapeuta expondrá gradualmente a su hijo a los perros, en un entorno seguro y de apoyo, para que pueda controlar su miedo al comprender que la mayoría de los perros no son peligrosos.

Terapia de exposición para las fobias a los perros

El proceso mediante el cual los terapeutas tratan las fobias se denomina terapia de exposición. Este tipo de terapia puede acostumbrar a su hijo a la presencia de perros y, finalmente, ayudarle a superar su miedo. El progreso de la terapia de su hijo dependerá de la profundidad de su fobia a los perros.

A menudo, los terapeutas empiezan hablando con su hijo sobre los perros, y luego pueden pedirle que haga dibujos de perros o que mire fotos de perros. Cuando su hijo se sienta cómodo con esto, el terapeuta puede pedirle que vea vídeos de perros. Cuando su hijo se sienta cómodo viendo vídeos de perros, el terapeuta le expondrá a un perro de verdad, desde una distancia segura.

Con el tiempo, cuando tu hijo aprenda a controlar su miedo mediante ejercicios de relajación, podrá acercarse a los perros e incluso tocarlos e interactuar con ellos sin miedo.

[ad_2]

¿Tiene preguntas o quiere compartir su opinión?

Haga clic aquí para crear un tema en nuestro foro (PetW.org)

IMPORTANTE

Por favor, tenga en cuenta que toda la información proporcionada en MascotaWiki.com (incluyendo síntomas, tratamientos y enfermedades y otros) es sólo para fines informativos y educativos y nunca debe bajo ninguna circunstancia aplicar la información proporcionada en MascotaWiki.com en sus mascotas. Por favor, consulte con un veterinario certificado sobre sus mascotas.