Ciclosporina genérica para perros

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La ciclosporina para perros se recomienda cuando el perro está afectado por una enfermedad autoinmune. La ciclosporina es un animosupresor, disponible sólo con receta médica. Los compuestos de la ciclosporina afectan a la captación de iones de calcio.

Usos de la ciclosporina para perros

La ciclosporina genérica es un supresor del sistema inmunológico que trabajará en la captación de iones de calcio, que está involucrado en los glóbulos blancos o los linfocitos. Al afectar a los glóbulos blancos, el sistema inmunológico no funcionará a su máxima capacidad y no atacará a las células del cuerpo del perro. La ciclosporina se utiliza en perros con enfermedades autoinmunes como:

• Anemia hemolítica
• Lupus
• Queratoconjuntivitis sicca

La ciclosporina oral también puede administrarse después de un trasplante de riñón, ayudando a la mascota a aceptar el órgano más fácilmente.

Aprobación de la FDA y otros nombres

A pesar de que la ciclosporina oral no está aprobada por la FDA para su uso en mascotas, puede ser administrada por los veterinarios como un medicamento extra. La ciclosporina tópica está aprobada por la FDA para su uso en mascotas. La ciclosporina también se puede encontrar bajo los nombres de Atopica (la crema tópica) y Optimmune.

Efectos secundarios de la ciclosporina para perros

La ciclosporina puede tener una serie de efectos secundarios que incluyen:

• Vómitos y diarrea
• Úlceras de estómago (ciclosporina oral)
• Erupciones cutáneas, especialmente a las cremas tópicas de ciclosporina
• Pérdida de apetito y de peso
• Letargo
• Infecciones secundarias, ya que el sistema inmunitario está suprimido y no puede responder a las células extrañas que pueden atacar el sistema del perro
• Linfoma, si el tratamiento se administra durante un largo periodo de tiempo

La ciclosporina también puede interactuar con otros medicamentos, así que informe a su veterinario si su perro está tomando algún otro tipo de medicación. Las ciclosporinas genéricas no deben usarse en perras embarazadas o en período de lactancia, ya que no se han realizado estudios que demuestren que los medicamentos son seguros. La ciclosporina no puede administrarse a perros menores de 6 meses ni a perros pequeños que pesen menos de 4 libras.

Dosis de ciclosporina

La ciclosporina está disponible en forma de cápsulas o comprimidos de 25 y 100 mg. También existen inyecciones de ciclosporina. Sin embargo, la dosis adecuada sólo puede determinarla el veterinario, basándose en el estado de salud del perro, su tamaño, edad y raza. Cuando se administra como pomada tópica, la ciclosporina suele aplicarse dos veces al día. El medicamento debe administrarse después de las comidas, para proteger el estómago y prevenir las úlceras gástricas.

Tratamiento de enfermedades secundarias

El tratamiento con ciclosporina para perros debilitará el sistema inmunitario, lo cual es beneficioso, porque el sistema inmunitario no atacará el cuerpo del perro. Por otra parte, la debilidad también resultará invulnerable a numerosas infecciones. Estas infecciones secundarias deben detectarse lo antes posible y tratarse, para que el perro no tenga otras complicaciones.

Normalmente, un perro en tratamiento con ciclosporina estará bajo estrecha vigilancia. Se realizarán análisis de sangre para evaluar el estado del perro y establecer si la dosis es correcta o debe cambiarse.

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