Causas de la incontinencia de las perras

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La incontinencia canina puede afectar a perros de ambos sexos, pero las hembras son más propensas a sufrir esta condición. La perra liberará orina de forma inconsciente, especialmente mientras descansa. La causa de la incontinencia suele ser un desequilibrio hormonal, pero también puede haber otros factores que la provoquen. La incontinencia puede ser tratable en algunos casos, dependiendo de la causa subyacente.

Desequilibrio hormonal e incontinencia hormonal

Una causa común de la incontinencia urinaria en las perras es un desequilibrio hormonal. El estrógeno, una hormona sexual femenina que también es responsable de la contracción de los músculos de la vejiga urinaria. Si la perra tiene una deficiencia de estrógenos, no será capaz de controlar los músculos de la vejiga y puede liberar pequeñas cantidades de orina sin saberlo realmente. La falta de estrógenos es común en las perras esterilizadas y, en cuanto se les suministra estrógenos, la perra dejará de tener incontinencia. Las perras mayores también son propensas a desarrollar incontinencia debido a la falta de estrógenos suficientes, ya que con el envejecimiento, el cuerpo produce menos estrógenos.

La condición puede ser tratada mediante la administración de dietilbestrol, que es una hormona sintética que sustituye al estrógeno. La administración prolongada de hormonas puede tener varios efectos secundarios, por lo que es mejor que la dosis sea lo más baja posible. La dosis puede ajustarse periódicamente o incluso puede interrumpirse durante cortos periodos de tiempo.

Infecciones recurrentes del tracto urinario en perros

Las infecciones recurrentes del tracto urinario (ITU) pueden causar un debilitamiento de los músculos de la vejiga e incontinencia. La ITU está causada por una acumulación de bacterias en el tracto urinario y puede tratarse con antibióticos. La infección también puede desaparecer sin tratamiento, pero esto puede afectar a la vejiga y al tracto urinario a largo plazo y debilitar el organismo del perro. Por lo tanto, si nota síntomas como una micción excesiva y un aumento de la sed o el perro hace esfuerzos para orinar, no dude en ponerse en contacto con su veterinario y conseguir antibióticos.

Tumores o pólipos en el tracto urinario del perro

Los tumores pueden ser crecimientos celulares benignos o malignos que pueden afectar a la vejiga o al tracto urinario. Los ultrasonidos y los rayos X deben ser realizados para detectar la ubicación exacta de estos crecimientos celulares. Puede ser necesaria una biopsia. El examen de las células determinará si el crecimiento celular es benigno o maligno. La cirugía es necesaria para eliminar la incontinencia y si el tumor es maligno, el perro también necesitará quimioterapia.

Lamido excesivo de los genitales

Cuando la perra se lame los genitales en exceso, puede liberar algo de orina, ya que los músculos de la vejiga estarán relajados. Un lamido excesivo de los genitales puede ser indicativo de una infección, por lo que es necesario consultar con el veterinario y ver si su mascota está sana.

Problemas congénitos

Si la perra nace con ciertos defectos anatómicos de la vejiga o la uretra, puede tener incontinencia. En este caso, sólo la cirugía puede solucionar el problema. De lo contrario, la perra tendrá que llevar pañales o se pueden comprar unos absorbentes para la incontinencia.

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